Esta permitirá un acceso más expedito a los subsidios y mejorará la capacidad de planeación territorial en el país
El presidente Iván Duque sancionó, junto con el ministro de Vivienda, Jonathan Malagón, la Ley de vivienda y hábitat, con la que se busca generar un acceso más expedito a los subsidios de vivienda, mejorar la capacidad de planeación territorial de los municipios, a través de herramientas como los Planes de Ordenamiento Territorial (POT) y se reglamenta la política de vivienda rural.
Entre las principales novedades de esta ley se incluyen la flexibilización de los plazos de financiación de los créditos de vivienda, fijado actualmente en 30 años; y la eliminación de la restricción de tiempo para vender las casas compradas a través del subsidio Mi Casa Ya.
Lo anterior, sin embargo, no aplica a las viviendas gratis, no obstante, se reduce el tiempo en el que las familias podrán disponer del activo, pues pasa de 10 a cinco años. Además, se estableció que quienes hayan recibido subsidios para mejorar sus viviendas podrán ahora acceder a otros para la compra de una nueva.
“La Ley de Vivienda y Hábitat simplifica todas las intervenciones, a partir de ahora vamos a tener subsidio VIS, subsidio no VIS, mejoramientos de vivienda y subsidios de vivienda rural, toda la oferta institucional del Estado en términos de vivienda va ser mucho más fácil de aplicar con esta nueva ley”, manifestó el ministro de esta cartera.
La nueva Ley de Vivienda y Hábitat busca, entre otros aspectos, promover beneficios diferenciales para las mujeres que han sido víctimas de violencia intrafamiliar, buscando de esta manera su autonomía económica, seguridad y bienestar material y emocional.
En cuanto a la política de vivienda rural, se estableció que los subsidios se entregarán de manera de focalizada y tendrán mecanismos de financiación específicos.
Además, tomando en consideración las dificultades de acceso a ciertas zonas en el territorio nacional, se determinó la posibilidad de aumentar el valor del subsidio en el rubro de transporte de materiales.
Otra novedad de la Ley de vivienda y hábitat es que introduce la categoría de vivienda de interés cultural, definida como una en la que el diseño, construcción, financiación y criterios normativos obedecen a costumbres y estilos de vida, arraigados al territorio y el clima en el cual se ubica. El Gobierno Nacional podrá destinar recursos para promover este tipo de inmuebles.
“Dentro de los atributos más relevantes de esta nueva ley sancionada se destacan las acciones para promover la gestión efectiva de suelo urbanizable e impulsar el ordenamiento territorial en las regiones, así como la definición de la política de vivienda como una política de Estado”, manifestó la presidenta ejecutiva de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), Sandra Forero Ramírez.
Fuente: La República